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4 comidas que si supieras cómo se hacen no querrías comer nunca más en tu vida

No vas a querer volver a probarlas una vez que sepas cómo se producen

Hay pasiones que no se pueden cambiar, como dijo el personaje de Francella en “El Secreto de sus Ojos”. Para algunos es el fútbol, para otros la música o el baile, incluso la política. Los fanatismos son malos, pero las pasiones son indispensables.

 

Para muchos de nosotros la comida es una pasión. Sí, la comida. Probar diferentes combinaciones para que nuestros paladares gocen, dormir intensas siestas los fines de semana después de darse una panzada y volver a casa para comer el tan conocido bajón: todas estas actividades (y más) explican por qué comer es una pasión.

 

Lamentablemente, y muy a nuestro pesar, muchas de nuestras comidas y bebidas favoritas involucran procesos bastante desagradables o incluyen ingredientes que de seguro no esperabas estar consumiendo. Preparate para conocer algunas cosas que no sabías sobre tus platos favoritos:

 

La gelatina y todos sus derivados 

Pero si se ven tan inofensivos…

La gelatina proviene en un 99% del colágeno (proteína) extraído de diversas partes de vacas y cerdos, entre ellas piel, huesos, pezuñas y tendones. Este es un proceso híper industrializado y nada nuevo, lamentamos informarte. Muchas veces se muelen o se hierven los huesos de los animales en el proceso.

 

Si pensás que cuando decimos gelatina hablamos del postre para niños y enfermos, estás muy equivocado. Este producto es parte esencial de chicles, gomitas y miles de golosinas, además de muchos postres y comidas. 

Este video explica de manera muy sencilla cómo se hace la gelatina industrial.

Si sirve de consuelo, la gelatina es muy buena para tu cuerpo, ya que ayuda a fortalecer músculos y huesos

 

Carmín, el colorante hecho a base de insectos

La horrible verdad sobre los Skittles rojos y otros productos de este color.

¿Tenés un color de Skittle favorito? Esperemos que no sea el rojo.

 

El Carmín (o ácido carminoso) es un colorante que se obtiene gracias a la cochinilla, un insecto similar a un escarabajo. Estos insectos generan un líquido que, al ser mezclado con sustancias químicas, termina generando un color rojo a rosa muy buscado en todo tipo de alimentos.

 

Cuando decimos todo tipo de comidas, nos referimos realmente a una variedad espectacular: yogures, helados, golosinas, bebidas con y sin alcohol, incluso en ciertas frutas. Starbucks lo usaba en sus Frapuccinos hasta que decidió dejar de hacerlo en 2012 por las quejas de sus clientes.

 

¿La cerveza tiene pescado en sus ingredientes?

Por suerte Guinness está en proceso de eliminar este ingrediente.

No nos queremos meter con la bebida más querida por muchos irutianos, pero en muchas cervezas se utiliza el clarificante Isinglass, un extracto de la vejiga natatoria de peces como el Esturión.

El Isinglass se usa para que la cerveza tenga un look más claro y atractivo, siendo utilizado en el proceso de elaboración de cerveza desde hace cientos de años. No tiene olor ni sabor, por lo que no podrías distinguirlo aún si quisieras.

Para dejar a nuestra comunidad más tranquila, cervecerías famosas mundialmente como Guinness incluyen este clarificante, pero no hay información que indique que marcas nacionales lo usen en sus preparaciones.

Realmente no querés saber esto sobre el helado de vainilla

No hay forma bonita de decir esto: la vainilla se consigue gracias al ano de los castores.

El castóreo es una secreción que proviene de estos animales, que lo usan para acicalar sus pelajes. Hacia fines del siglo XIX los castores fueron prácticamente extinguidos a causa de la excesiva caza para conseguir esta secreción, que no solo es un aditivo alimentario, sino que también funciona para la industria de los perfumes. Por suerte, en los últimos años se ha reducido bastante su uso en pos de la vainilla artificial.

Obviamente que el castóreo pasa por muchos procesos químicos e industriales antes de ser parte de tu helado, pero nos pareció importante que sepas de dónde puede llegar a venir ese rico gusto a vainilla.

Nuestras comidas favoritas de seguro que van a seguir iluminando nuestros paladares por muchos años. Pero hay procesos e ingredientes que, honestamente, es mejor olvidar.