Primero lo primero, vamos a contar qué es la deuda externa, ya que parece muy obvio pero para entender las decisiones políticas es necesario tener claro varios conceptos como este. La Deuda Externa es el conjunto de obligaciones que tiene un país con acreedores que residen en el extranjero.
La deuda externa se compone de deuda pública y deuda privada. La primera se refiere a los préstamos contraídos por el Estado y sus instituciones mientras que la segunda se refiere a la deuda contraída por empresas y familias. Los acreedores en el extranjero en tanto, pueden ser bancos extranjeros, gobiernos de otros países u organismos internacionales que entregan financiamiento como el Fondo Monetario Internacional (FMI).
El FMI: ¿ayuda vital o enemigo de los pueblos?
Ahí nos detenemos porque todos mencionamos o escuchamos sobre el Fondo Monetario Internacional, que según lo establece el organismo es una organización integrada por 184 países, que trabaja para promover la cooperación monetaria mundial, asegurar la estabilidad financiera, facilitar el comercio internacional, promover un alto nivel de empleo y crecimiento económico sustentable y reducir la pobreza.
Todo suena bien, pero el problema es que los efectos de la deuda que se generan a través de este organismo, que más allá de que “sus fines son evitar las crisis en el sistema, alentando a los países a adoptar medidas de política económica bien fundadas”, en reiteradas oportunidades históricas esta premisa no se cumplió, entonces la deuda del pueblo argentino es bastante y la deuda con el pueblo argentino por quienes tomaron adquirieron el préstamo también.
En el 2015, por decisión del gobierno de Mauricio Macri, Argentina volvió a ser un país deudor del FMI.
De esta forma, si el endeudamiento fue utilizado para inversión, este endeudamiento tendrá un “efecto positivo” ya que permitirá alcanzar un mayor desarrollo futuro, el que habría sido imposible sin poder contar con los recursos rápidamente. Pero, por el contrario, cuando el endeudamiento se explica por una mala administración los efectos pueden ser desastrosos ya que se tendrá que pagar el préstamo contraído (más intereses) mientras que no se han generado nuevas fuentes de ingreso, ni recursos para el bienestar de la población traducidos en accesos a una mejor educación o salud pública (entre otros recursos tan indispensables y necesarios).
¿Cuánto sería esa deuda por Argentino?
No son cálculos exactos porque las publicaciones son por etapas, pero desde la página oficial del Ministerio de Economía de la Nación pudimos calcular con las referencias de la última actualización. Esto se resume en que hoy la deuda ronda aproximadamente los $ 323.742.000 Dólares.
Para tener una dimensión de esta cantidad de dinero, repensamos desde la cantidad total, tomada de la última actualización del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC), los argentinos somos en total, aproximadamente, 45.376.763.
Entonces, dividiendo el monto total de la deuda adquirida en el Gobierno de Mauricio Macri, cada argentino debe al Fondo Monetario Internacional unos $ 7.135 Dólares. Es decir, que cada habitante de Argentina pagando en efectivo puede tener un auto cero kilómetro de media gama, estimando la cotización del dólar actual que está alrededor de $ 65 aproximadamente.
Para pagar la deuda al FMI necesitaríamos alrededor de un poco más de 45 millones de autos graficando la cantidad aproximada.
Y por estar endeudados, sin tener claro en qué inversión pública se fue ese dinero, también estamos presentes en el listado de los países más endeudados de América Latina: Argentina ocupa el primer puesto, lamentablemente.
Además, desde el 2015 el país está en situación de estanflación, ¿Qué significa? Se produce un estancamiento de la economía y el ritmo de la inflación no cede. Por ende, los salarios se devaluaron y es una carrera entre la inflación, los salarios, y la deuda que crecerá y crecerá si no se paga.
Todo esto se debe organizar y en eso está el actual gobierno de Alberto Fernández, que además de intentar salvar la economía del país, debe ser cuidadoso salvando las vidas tras pandemias como el COVID-19.
El FMI ante la situación del COVID-19
En respuesta directa a la crisis de la COVID-19, el Directorio Ejecutivo del Fondo Monetario Internacional (FMI) explicaron que tomaron medidas que le permitirán ofrecer alivio para el servicio de la deuda externa de los países miembros, especialmente los más pobres y más vulnerables.
El estallido de COVID-19 y la turbulencia económica internacional que conlleva crean una necesidad crítica de respaldo a los países miembros del FMI (ahí estamos nosotros, Argentina). A todo esto, se incluye un apoyo excepcional para las formas de pagos de los países miembros más pobres y golpeados por la pandemia con especial dureza. Concretamente, en virtud de esta decisión, todos los países miembros con un ingreso per cápita bajo podrán beneficiarse del alivio del servicio de la deuda por un período máximo de dos años. La decisión regirá cuando por la pandemia mundial letal que causa graves trastornos económicos en todos los países miembros del FMI y genera necesidades de la balanza de pagos a tal escala que justifique un esfuerzo internacional concertado por brindar respaldo.
El FMI con la deuda de todos los países
Ahora ya lo sabés, si todos pagáramos la deuda con dinero de nuestro bolsillo, nos costaría tanto como pagar un auto cero kilómetro, en dólares. Qué dolor, ¿no?
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