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¿Qué es la educación sexual y por qué es tan importante?

Repasaremos los puntos básicos de este tópico para entender su valor en nuestras vidas.

“La educación sexual ayuda a las personas a obtener la información, las herramientas y la motivación necesarias para tomar decisiones saludables sobre el sexo y la sexualidad”. Así define en su libro a la educación sexual el escritor y psicopedagogo Frederic Boix.

A partir de esta definición y de la poca atención que se le presta a esta temática en nuestro país, es que decidimos hacer un repaso del concepto en sí y de por qué hay que estar atento e informado sobre ella.

Siempre es bueno hablar sin pelos en la lengua.

Para los millennials y centennials no es fácil darse cuenta que saben menos que el otro, en todo sentido. Y qué vergonzoso sería preguntarle algo sobre la sexualidad al otro, ¿no? ¡La respuesta es no! Haganlo sin miedo.

Las alertas siempre deben estar encendidas, ya que hoy en día las enfermedades e infecciones de transmisión sexual y los embarazos están cada vez más presentes en la adolescencia.

Por eso es que se necesita naturalizar y charlar sobre la educación sexual desde temprano. Se le debe perder el miedo a esta temática y que las charlas en casa no sean solo sobre el colegio, los amigos y los cumpleaños. No tengan dudas que la prevención del embarazo y del contagio de enfermedades debe empezar a tomar más atención.

El segundo hogar de los adolescentes.

Todos sabemos que la relación con la escuela es de amor-odio, pero queramos o no, es nuestro segunda casa, y por eso, ahí también se puede hablar de educación sexual. Ambos lugares son complementarios y de vital importancia para ellos.

La ley 26.510, que el 4 de octubre de 2006 dejó asentado que todos los establecimientos educativos estatales o privados debían recibir educación sexual integral (ESI), parece no haber tenido mucho éxito, ya que un 79% de los chicos reconoció no estar bien informado de todo lo que respecta a la ESI.

Cabe destacar que este tipo de educación no sólo hace hincapié en educar sobre la sexualidad, sino que también romper algunos estereotipos de género, fomentar el cuidado del cuerpo y promover el respeto y la responsabilidad para con la diversidad sexual.

Si el pizarrón está vacío, empezá a escribir porque siempre hay que estar informado.

Claro está que los chicos pasan mucho tiempo en las escuelas, por lo que la educación sexual no solo debe brindarse en casa, sino que también en el colegio. Ambos lugares son complementarios y de vital importancia para ellos.

Para entender y empezar a conocer de qué se trata, vamos a hacer un listado de los puntos más importantes de la misma para estar informados de la educación sexual.

Siempre presente.

Si vas a tener relaciones sexuales, el uso de preservativos es la mejor forma de reducir el riesgo de contraer una infección de transmisión sexual (ITS). Más allá que tu pareja utilice algún método anticonceptivo, siempre que tengas relaciones sexuales utilizá un preservativo de látex.

No solo se puede contraer una ITS en el coito, sino que también en la práctica del sexo oral, por lo que también se debe usar un condón en dicho momento. En tanto, no dudes en realizarte estudios médicos periódicamente para asegurar que estás sano; hay diferentes pruebas para detectar ITS.

Aprendé a utilizarlo de manera correcta.

En primer lugar, seguí las instrucciones del empaque para asegurar el uso correcto. Además, verificá la fecha de vencimiento -si llega a estar vencido- que ni se te cruce por la cabeza usarlo porque es lo mismo que no usarlo. 

Siempre debés llevar un preservativo encima, pero ojo, no lo guardes en lugares donde pueda calentarse, ya que puede dañarse. 

Al momento del acto sexual ya sea vaginal, anal u oral, se debe utilizar un preservativo nuevo, siempre colocándolo en la punta del pene erecto con el lado enrollado hacia afuera. Luego pellizcá la punta lo suficiente como para dejar espacio para que se deposite el semen, sostené la punta y desenrollalo hasta la base del pene erecto.

Después de la eyaculación y antes de que se ablande el pene, sujetá el borde del preservativo y retirate con cuidado. Una vez que lo saques, asegurate de no derramar semen y envolvelo en un papel para arrojarlo en un tacho de basura. Por otro lado, en caso de sentir que el preservativo se rompe, intervení de inmediato y utilizá uno nuevo.

Si seguís estos tips, los condones tienen una probabilidad de casi un 98% de evitar un embarazo. Y ojo, prestá atención porque si no se usa de forma correcta, la probabilidad desciende a un 82%.

¿Y los métodos anticonceptivos femeninos?

Existen varios métodos anticonceptivos para las mujeres, y aquí te brindaremos un pantallazo de educación sexual con los más utilizados. Lógicamente que hay algunos más seguros y eficaces que otros, pero cada cuerpo y cada una deberá ver con su médico cuál es el pertinente para ella.

Dispositivos intrauterinos (DIU): se colocan dentro del útero. Son eficaces y se pueden recetar para disminuir los dolores menstruales y el sangrado. Si se utilizan al pie de la letra, tienen una eficacia aproximada del 99% para evitar embarazos.

Implante anticonceptivo: es una varilla flexible que el médico coloca debajo de la piel de la parte alta del brazo. Este implante libera una hormona encargada de evitar el embarazo por tres años. También tiene una eficacia aproximada del 99% para evitar embarazos.

Inyección anticonceptiva: se coloca cada tres meses y tiene como ventaja que no requiere atención diaria. Si te la inyectas a tiempo, tendrá una probabilidad aproximada del 99% de evitar un embarazo. Caso contrario, el porcentaje disminuirá a 94%.

Las famosas pastillas anticonceptivas.

Píldora, parche y anillo anticonceptivo: los tres métodos contienen 2 hormonas, un estrógeno y una progestina, y tienen la misma probabilidad de evitar un embarazo que las anteriores si es que se toma en tiempo y forma: 99%. En tanto, si no se siguen las indicaciones, este porcentaje disminuye a un 91%; la sexualidad es un tema que siempre debe estar presente y se debe naturalizar cada vez más.

La píldora requiere tomar una por día y es uno de los métodos más utilizados. El parche es un adhesivo que se coloca sobre la piel y se utiliza durante tres semanas, mientras que una semana no. Luego te lo volves a poner, y así sucesivamente. Por último, el anillo funciona igual que el parche, pero se inserta en la vagina.

No tan recomendados, aparecen los preservativos femeninos que se deben usar cada vez que haya una relación sexual. Si se utilizan bien, el porcentaje para evitar un embarazo es del 95%. Pero ojo, si no se usa en forma correcta, solamente tienen una eficacia del 79%.

En caso de emergencia…

Obviamente que todos nos equivocamos en nuestras vidas, y por eso pasamos a este tópico tan delicado. Pese a que nunca se debe llegar a esta instancia, llegada la misma se debe saber que la pastilla anticonceptiva de emergencia se puede tomar hasta cinco días después del acto sexual (cuanto antes se tome, más eficaz será).

En conclusión, siempre que quieras tener relaciones sexuales deberás estar informado y consciente de lo que vas a hacer. Conocé todos los métodos anticonceptivos, las infecciones y toda la información pertinente.

Las decisiones sobre el sexo y tu cuerpo son muy importantes en tu vida. Por eso desde acá te aconsejamos que nunca dejes de hablar sobre la educación sexual: con amigos, con familia, con tu pareja, o con quien desees: preocupate por vos y por el otro.